jueves, 30 de agosto de 2012

ULTRAVOX - QUARTET

ULTRAVOX - QUARTETLlegaba el año 82 y Ultravox editaba su tercer disco con Midge Ure de cantante.
La expectación estaba garantizada, pues se habían anunciado cambios.
Uno de ellos era que dejaban los míticos estudios alemanes de Conny Plank y para la producción elegían, nada más ni nada menos que a Sr. George Martin, mítico productor de los Beatles. También con el productor, el no menos mítico ingeniero de sonido Geoff Emerick, por supuesto gracias a las grabaciones del cuarteto de Liverpool.
Además de eso había un cambio de imágen. Algo más informal, menos sobrios, menos trajes estilo 50.
Los tiempos cambiaban, todo iba rápido, y si no espabilabas te quedabas a la cola.
El resultado no es tan drástico como podría parecer a priori. Siguen siendo Ultravox.
Temas como Serenade, Reap The Wild Wind, la mítica Hymn o mi adorada y escondida The Song (We Go) lo dejan claro.
Martin sabe hacer su trabajo de manera magnífica, no se sobrepone al grupo, sino que les deja manga ancha, que sean ellos mismos, pero......peros.
Mi pero viene porque siendo un gran disco, me falta ese sonido barroco como yo lo llamo, ese sonido un tanto sobrecargado pero maravilloso, con esos coros que aparecían y desaparecían por arte de magia.
¿Estaba calculado de antemano o sonarían mejor en los citados estudios alemanes de Conny Plank?
Me quedo con la duda.
Mi otro pero viene hay un par de temas buenos, pero que no están a la gran altura del resto.
Seguro que el que lea esto pensará : ¡Qué exigente está hoy éste!
Y sí, porque a los grandes hay que exigirles, porque pueden dar más.
Sin embargo, y con esos peros, es un gran disco. Maravilloso. Y como nunca me cansaré de decir, alguno por el tema más flojo de este disco, pagaría una fortuna por haberlo escrito él.
Los seguidores del grupo estábamos más que satisfechos con lo que nos ofrecían.
Los cuatro singles que se editaron, entraron en el top 20 de las listas británicas, y el LP llegaba al puesto 6.
Curiosamente en USA consiguieron su puesto más alto, el puesto 61.

HEAVEN 17 - PLAY TO WIN

¿A quién de los que nos gustaban y gustan estos sonidos, no se le ponían los ojos como platos cuando veíamos la etiqueta "Música Tecn Pop?
Creo que a casi todos.
El sello Virgin puso dicha etiqueta en grupos de su sello que utilizaban principalmente sintetizadores y que supuso un nuevo estilo y una nueva etiqueta para poder identificarlos.
Uno de esos grupos fueron Heaven 17, grupo surgido de la escisión de The Human League.
Curiosamente, el éxito que se les nego juntos, lo obtuvieron por separado.
Marsh y Ware reclutaron a Gregory como cantante y lanzaron en el 81 estos dos temazos con gran sabor a Tecno Pop sí, pero también un gran sabor de Funk electrónico de alto voltaje.
Y digo los dos temas, porque aparte de la cara A que es Play to Win y que es un clásico del sonido hecho con sintetizadores, está la maravillosa, y para mí mejor, Penthouse and Pavementet en la versión larga.
Un Funkazo sintético pero con sabor a Funk Soul de todos los tiempos gracias a esas voces femeninas que arropan al cantante y también a ese pedazo de bajo que suena por detrás de la capa sinteto-cibernética y que suena a gloria.
Habían claudicado a los intrumentos tradicionales, cosa que antes no habían hecho. Y, aunque algunos al principio lo veíamos como "instrumentos obsoletos y entromentidos en ésto", era sólo eso, al principio, porque pasados los tres primeros compases ya quedabas atrapado y sometido a sus encantos.
Esto era en el 81. Esto era nuevo. Esto era ser moderno. Esto era innovador. Esto era también la causa de que parecieras un hortera, un freaky y un comercialoide porque muchos  no entendían que te gustase "esa música".
Se me olvidaba. Y también fue el comienzo de que todo el mundo te dijese que eso no era música, que era apretar un botón y listo, que lo podía hace cualquiera, que bla,blabla. Lo que se sigue oyendo ahora treinta años después.
En fín, sin tener ni idea de sintetizadores, pero por lo que he leido:
- Algunos fallaban más que una escopeta de feria.
- Había que programarlos, no se programaban sólos.
- La gran mayoría, eran monofónicos, con lo cual no sonaba más de una nota por mucho que tocases
   todas las teclas.
 - Y por último y no por ello menos importante, y tampoco por ello más que dicho por un servidor :
    Las ideas y la composición aún era y son humanas. Así que si no hay buen materíal, puedes tener
    la mejor computadora musical del mundo y no valdrá de nada.
    Asímismo pasa aunque seas un virtuoso de cualquier instrumento.
¡Cómo me lío! Pero para eso tengo un blog.
¡A bailar!
    PWPP