sábado, 10 de mayo de 2014

THE GRID - ELECTRIC HEAD

Dave Ball y Richard Norris, o lo que es o mismo, The Grid, debutaban en el siglo pasado, 1990, con el mejor disco de toda su discografía, que ya de por sí es buena.
Podríamos decir que estos ya veteranos de la música por aqueños años, recogieron la esencia de todo lo que se estaba haciendo por aquel entonces dentro de los sonidos electrónicos más actuales y lo escupieron en este Electric Head.
Techno, House, Electro, Synth Pop e incluso pequeñas dosis de Ambient y Electrónica están presentes durante todo el disco.
Como un trabajo de su época, está orientado preferentemente al baile, pero también hay momentos para la calma.
Así, la primera cara empieza de forma más tranquila y ambiental para ir poco a poco cogiendo ritmo.
Temas como One Giant Step, Driving Instructor o A Beat Called Love, (esta última es la única que puede recordarnos ligermante que uno de sus componentes estuvo en Soft Cell) son muestras del universo musical electrónico que The Grid nos quieren presentar.
Pero si la cara A no es buena, la cara b ya es genial de principio a fin.
Intergalactica es un temazo como la copa de un pino con un estibillo sencilo pero arrebatador.
This Must Be Heaven es House con sabor a Funk electrónico con una melodía impecable y elegante.
Doctor Celline posee un bajo demoledor, destilando un Techno soberbio, bailable e imparable.
Strange Electric Sun suena más Electro de lo que es gracias a esa voz vocorizada que aparece a lo largo del tema. Synth Pop con ciertos aires de cabaret.
Floatation nos relaja de tanto ritmo, aunque también lo tiene, pero más pausado. Ambientes ensoñadores con un bajo sintético que lleva el peso del tema.
Y con Virtual se despide el disco, ofreciéndonos apenas más de dos minutos de electrónica espacial.
Sumemos a todo ello que, entre tema y tema, hay una serie de interludios o intermedios, que apenas duran veinte segudos, con diferentes ambientes.
Como dije un muy buen disco que nos ofrece todo lo que se hacía por aquellos años 90 en lo que se refiere a música electrónica en su vertiente más bailable.
Un trabajo vigente y que es necesario escuchar.


SOF CELL - CRUELTY WITHOUT BEAUTY

Casi veinte años después, y sin que nadie se lo esperase, el dúo británico Soft Cell se reunieron para sacar un nuevo disco y hacer unos directos.
El grupo empeza a ser reivindicado por muchos grupos como un referente. No sólo eran grupos que practicaban Electropop o Future Pop, sino otros con estilos distintos, como por ejemplo Marilyn Manson.
A todo ello debemos añadir que el Electroclash empezaba a tener mucho auge.
Un Electroclash que para mí bebía mucho del Tecno Pop de los 80, de la New Wave más electrónica y si me apuras de los New Romantics.
Vamos, un revival en toda regla, pero actualizado para los tiempos del nuevo milenio.
Vaya por delante que a mí no me desagradó nada en su momento, ni ahora tampoco.
Dicho todo lo anterior, no cabe duda de que Soft Cell tuvieron mucho que ver.
Así que, supongo que por que les apetecía, (no eran entes acabados, ni mucho menos), porque pensaron que podían volver teniendo algo que decir, y también, porque no decirlo, para darse un baño de masas y de dinero, que a nadie la amarga un dulce, se metieron en el estudio y sacaron este Cruelty Without Beauty en 2002 que se me antoja que roza a gran altura y no representa un lunar en su discografía.
Es más, me parece un gran disco.
Y los que me conocéis ya sabéis que yo, en un principio, lo de las reuniones las pongo siempre en cuarentena, aunque también al final claudique en muchos casos.
Algo bueno que tiene Soft Cell es que nunca nadie podrá sonar como ellos. Suena tonto, pero así lo veo. Sólo estos dos personajes juntos son capaces de sonar así. Para bien o para mal.
Así que nadie mejor que ellos para darle continuidad al sonido Soft Cell que ellos dejaron aparcado en el 84 por última vez.
Mejores medios, pero sin embargo manteniendo la esencia que los hizo reconocidos y reconocibles.
Austeridad sonora, melodías y ritmos hechos por Dave Ball que, aparentemente, sólo aparentemente, parecen sencillas y fáciles de elaborar por cualquiera. Pero no es así.
Mar Almond descargando pasión y emoción en su interpretación.
Monoculture, The Night, Dark Times, Together Alone, whatever It Takes, All Out Of Love, y porque no decirlo, todos los temas siguen destilando la esencia fundamental del grupo.
En pocos momentos podemos escuchar acercamientos de los que ambos componentes hicieran por separado durante tantos años.
Y es que parece como si quisieran decirnos a los seguidores de siempre y a los jóvenes que los empezaban a concocer:
"Somos Soft Cell y podemos serlo siempre que queramos"
Un trabajo sin desperdicio. Puede que para algunos suene a tiempos pasados, pero a mí me suena a un gran grupo que seguía ofreciéndonos muy buenos temas.