miércoles, 8 de agosto de 2012

ULTRAVOX! - HA! - HA! - HA!

Segundo disco de la banda editado también en el 77 como el debut y que también seguía contando con John Foxx como cantante.
Voy a dejar algo claro:
Este disco vale la pena tenerlo simplemente por esa joya que aquí se encuentra y que se llama Hiroshima Mon Amour.
El resto da igual, como si te produce hurticaria cuando lo escuchas. Repito, ese tema es una joya absoluta. Cuando casi nadie lo había hecho antes, Ultravox! se unieron a ese selecto grupo que hicieron Tecno Pop/Synth Pop unos años antes de que surgiera tal estilo.
A Foxx ya le empezaba a fascinar las posibilidades de los sintetizadores y aquí lo demuestra abiertamente.
Y también empieza a notarse en otros temas como The Man Who Dies Every Day, en la primera mitad del tema Distant Smile donde el comienzo sosegado, ligeramente electrónico y con ambientes de Satie flotando, da paso a una descarga New Wave palpitante.
También está Artificial life con un comienzo muy sintético y un final apoteósico con ese violín potentísimo.
Violín que tiene más protagonismo durante todo el Lp y que está donde se necesita y nunca sobra.
Por cierto, el bajo sigue siendo mágico para mí. Suena fantástico siempre.
La producción estuvo  a cargo de Steve Lillywhite y del propio grupo. También habían estado ambos en la producción del disco de debut, pero la presencia de Brian Eno hizo que esto pasase a un segundo plano.
En sólo unos meses Ultravox! (sí con signo de admiración incluida) habían hecho dos discos, como se hacía en los 60. Y con sólo unos meses habían tenido una evolución más que palpable.
Sigue estando el Post Punk y la New Wave presente, un ejemplo de esto es el temazo RockWrock, pero la electrónica empieza a tener un lugar más que destacado.
También han ganado en cuanto a sonido, me parece más eleborado y robusto.
Seguían avanzando y no había retorno, pero tampoco obtuvieron éxito en las listas.
Aquí también incluyo el single que venía con las diez mil primeras copias del Lp. Dos buenos temas cortos que no desmerecen del resto.
 uha

5 comentarios:

  1. Impresionante. Gracias de nuevo, amigo.

    ResponderEliminar
  2. A mí hay aspectos de los Ultravox! que me gustan más que los Ultravox. Sus canciones suenan más frescas, y aunque el sonido dista mucho de lo que hicieron en la etapa de Midge Ure, hicieron cosas muy interesantes y canciones muy buenas, como The man who dies everyday, The wild, the beautiful and the damned, Quiet man o la fabulosa, como bien apuntas, Hiroshima mon amour, una de las mejores canciones de la historia del pop-rock.

    Saludos sintéticos

    ResponderEliminar
  3. Gracias a los dos.
    Amigo JL, me repito mucho, pero para mi son dos etapas distintas.
    Las veo distintas, aunque las dos tienen grandes momentos.
    Con Midge Ure, denostado por muchos, puede que fuera más comercial, pero el sonido era como más barroco y recargado.
    Y también como siempre digo, sí se les conoce como etapas con John Foxx y Midge Ure, pero el resto también formaban parte de las composiciones.
    ¿Qué seria el grupo si ese bajo, esos teclados, ese violín y esa batería?
    Pues algo muy distinto.
    Y si no escucha el U-Vox ya sin Warren Cann. Parece una gilipollez, pero todo suena distinto.
    Saludos sintéticos.

    ResponderEliminar
  4. Sí, a mí también me flipa "Hiroshima Mon Amour". Además, ese saxo tan característico me parece un gran acierto. Es como un toque de color en la enorme devastación que transmite el tema (ya no sólo es el título... es que realmente la densidad del melotrón y esas campanas lejanas sugieren un paisaje desolado). Al igual que "Just For A Moment" y "Dislocation", el tema forma parte del repertorio en directo de los actuales John Foxx And The Maths pero, en mi humilde opinión y a diferencia de los dos anteriores, que sonaron estupendos, a "Hiroshima..." le faltaba algo. El saxo, seguramente, pues, como digo, es el instrumento que le da el toque mágico, la identidad, a esta canción.
    No hablo de los demás temas porque, bueno, voy compartiendo las opiniones que se van comentando y, además, reconozco que cuando pongo este disco siempre me voy a "Hiroshima..." y "The Man Who Dies Everyday", jeje. Saludos.

    ResponderEliminar
  5. Es un buen disco en su conjunto, pero Hiroshima eclipsa todo lo demás. Pero también Dislocation es un temazo de electrónica Dark que sigue sonando intrigante y enigmática.
    Saludos sintéticos.

    ResponderEliminar