Rebuscando en Paperblog, he querido recuperar este comentario que hice en el blog anterior hace más de dos años.
No sólo sigo pensando lo mismo, sino que cada día me reafirmo más.
Sí ya sé que suena a viejo chocho nostálgico.
No significa esto que reniegue de las nuevas tecnologías. Las tengo, las apoyo y las uso como medio más versátil y cómodo para transmisión y transporte de datos pero...............
¡Lo siento! Cada vez noto que esos sonidos son eso, más datos, pero les falta "ALMA".
Aquí el artículo tal cual.
"Esta entrada a muchos puede chocarles, y a los que siguen el blog no tanto. Tenía dudas antes de hacer este comentario, pero una vez disipadas, me pongo presto a hacerlo, mientras me bullen las ideas por mi cerebro.
No quiero ser más papista que el Papa, y soy de los que ha claudicado durante años a las nuevas tecnologías y soportes que fueron apareciendo en el mercado. Cuando apareció el Cd, quedé abrumado por "algo", un soporte físico, de mucha calidad , sin desgaste, que duraría eones. Fui aparcando mis vinilos, pero no me deshice de ellos. Aparte de eso, la industria editaba cada vez menos en dicho formato, con lo cual no te quedaba más remedio que adaptarte. Poco a poco desapareció de las grandes superficies, sólo relegado a las tiendas especializadas, que aún así abrazaban el nuevo soporte. Yo, por aquel entonces, como no tenía ni idea, pensé que estaba loco un señor que dijo que sus discos de música clásica en vinilo eran mucho mejor que en Cd. ¡Pobre hombre! pensé yo también.
Abro un paréntesis. Ni que decir tiene que los primeros Cd eran mucho mejor soporte que lo que hay actualmente, pues yo mismo pisé uno repetidas veces y su sonido no variaba. ¡Prueba a hacerlo ahora! Se haría añicos. Llegó la era de Internet, el Mp3, posibilidad de escuchar música en tu Pc, es más, poco a poco se pudo intercambiar archivos de música que ocupan poco, y hoy en día esos archivos los puedes llevar en tu móvil. Yo también lo hago, está muy bien. Ocupa poco, no se estropea, y lo puede llevar a cualquier sitio.
Y ya no te cuento en un disco duro externo. Lo llenas de música y lo puedes llevar a casa de los amigos para enseñarles lo último que has conseguido. Pero amigo mío, pasan los años, (y no me influye el "revival" del vinilo), y falta algo, pero ¿El qué?. Pues lo que falta es algo que se fue perdiendo por comodidad, por que hemos ido amasando sin ton ni son muchos archivos digitales, porque por falta de tiempo y por el ritmo acelerado de vida que llevamos, en nuestros momentos de ocio también hacemos todo rápido y acelerádamente por inercia. Ese "algo" es el RITUAL. Sí amigos, el ritual de ver de palpar el formato, de ver la portada, porque el tamaño de las carcasas de los Cd ha ido constriñendo no sólo el espacio, sino la imaginación también.
Sacarlo de la funda, ponerlo en el plato, limpiar un poco esa electricidad estática, acercar el brazo y posar cálidamente la aguja y...........¡Click! ¡Shsssssssssssssssrrrrrr! ¡Atención! ¡Suena la música! Y empieza el recorrido por los surcos, esa calidez en el sonido que he descubierto con los años que no me produce ni el Cd ni el Mp3. Ese sonido que recorre los altavoces o los auriculares, que es menos frío y más envolvente y más..........Tienes que probarlo para notarlo.Que si se gasta, que si se raya, que si no tengo sitio, que el soporte físico se acaba, que sí, que sí, ¡Qué no hombre, mujer, gay, lesbiana, mayor, joven !
¡PON UN VINILO EN TU VIDA! Porque es algo físico, material, tangible y maravilloso.
¡PON UN VINILO EN TU VIDA! Porque animaremos a hacer otra vez pinturas y fotos extraordinarias.
¡PON UN VINILO EN TU VIDA!
Ponlo, eso sí, pero de calidad. Debe de ser de las pocas cosas en el que el peso importa. Pero que te den como mínimo uno de 180 gramos o más (que ya se empiezan a enterar muchas discografícas que editan o han recuperado el formato), porque de menos no es lo mismo, no está mal, pero no es lo mismo. Así el sonido es mejor y dura más.En definitiva,
¡PON UN VINILO EN TU VIDA!
No sé lo que opinareis ahora los que lo hicisteis en su momento. Supongo que lo mismo que entonces.
Lo cual me parece muy bien.