Aunque no hayas escuchado nunca un disco de Mike, seguro que algo, algún frangmento, alguna parte de sus extensos temas es casi seguro también que lo has escuchado.
Como no me voy de listo, reconozco que este disco no lo he escuchado mucho, pero ahora mismo, mientras escribo, lo estoy poniendo y apenas lo había hecho anteriomente.
Sin embargo, lo dicho. había partes de los dos temas que hay en el disco que me sonaban, y no sólo eso, me encantan.
Este fue su tercer trabajo, editado en el años 75.
Y aunque los últimos trabajos de Mike, no sean para echar cohetes, reconozcamos que sus comienzos fueron buenos.
A lo mejor no espectaculares, pero discos como éste te reconfortan, te hacen sentirte bien.
Momentos relajados, cambios cuando menos te los esperas que no te sobresalta, pero aparece una melodía preciosa, de esas que Mike sabía hacer a la perfección con su guitarra.
Melodías que terminas tarareando, moviendo la cabeza y te hace el tío pasar unos momentos increibles.
Un disco que para mí tiene mucho sonido folk inglés. Melodías y ambientes creados los cuales hacen que en mi mente aparezcan campiñas, bosques, jinetes, caballeros y princesas.
Elfos, duendes y hadas.
Todo muy épico y un tanto hortera para muchos. Pero a mí los mundos fantásticos siempre me han gustado.
Puedo ser el héroe por unos intantes.
Y la música de Mike en Ommadawn hace que me escape de este mundo real pero no tan bonito como el que yo me imagino.
No será su mejor trabajo, lo acepto, pero me encanta.
Como no me voy de listo, reconozco que este disco no lo he escuchado mucho, pero ahora mismo, mientras escribo, lo estoy poniendo y apenas lo había hecho anteriomente.
Sin embargo, lo dicho. había partes de los dos temas que hay en el disco que me sonaban, y no sólo eso, me encantan.
Este fue su tercer trabajo, editado en el años 75.
Y aunque los últimos trabajos de Mike, no sean para echar cohetes, reconozcamos que sus comienzos fueron buenos.
A lo mejor no espectaculares, pero discos como éste te reconfortan, te hacen sentirte bien.
Momentos relajados, cambios cuando menos te los esperas que no te sobresalta, pero aparece una melodía preciosa, de esas que Mike sabía hacer a la perfección con su guitarra.
Melodías que terminas tarareando, moviendo la cabeza y te hace el tío pasar unos momentos increibles.
Un disco que para mí tiene mucho sonido folk inglés. Melodías y ambientes creados los cuales hacen que en mi mente aparezcan campiñas, bosques, jinetes, caballeros y princesas.
Elfos, duendes y hadas.
Todo muy épico y un tanto hortera para muchos. Pero a mí los mundos fantásticos siempre me han gustado.
Puedo ser el héroe por unos intantes.
Y la música de Mike en Ommadawn hace que me escape de este mundo real pero no tan bonito como el que yo me imagino.
No será su mejor trabajo, lo acepto, pero me encanta.