sábado, 13 de julio de 2019

JOAO GILBERTO - CAETANO VELOSO - GILBERTO GIL - MARIA BETHANIA - BRASIL

En el año 81 se juntaron cuatro pesos pesados de la música brasileña, concretamente de la Bossanova, para interpretar temas clásicos del género.
Si somos estrictos, la verdad es que realmente sería un trio el que está en todo el disco porque María Bethania sólo está presente en el tema O Tabuleiro Da Baiana, aunque el efecto que salga su nombre en la portada seguro que ayudó a difundir más el disco.
Si fue cosa de los tres chicos o de la discográfica ya es algo que desconozco por completo.
El disco lo componen seis deliciosos temas que no tienen desperdicio siempre y cuando te guste la Bossa, si no pues la verdad no es tu disco.
Un disco apacible, sin sobresaltos, que la verdad es que uno escucha sin problema y encantado.
Es dulce y sensible.
Aquarela Do Brasil o Milagre, más la anteriormente citada O Tabuleiro Da Baiana son piezas que acaricia tus oidos y te relajan.
Además de ser un disco apropiado para estas fechas, cuando estás tomando un café tranquilo en una terraza y miras al mar de manera hipnótica.
No sé si es un gran disco de ellos. Tampoco importa.

THE PSYCHEDELIC FURS - THE PSYCHEDELIC FURS

En 1980 el grupos inglés debutaba con su primer Lp con el mismo nombre que la banda.
Compuesto por seis integrantes, el disco fue un buen comienzo para darse a concer.
Los caminos entre el Post Punk y la New Wave se unen sin complejos y el resultado es francamente interesante.
Es cierto que el grupo fue evolucionando a cada disco pero hay que reconocer que ya en este trabajo su sonido es reconocible.
En la cara a podemos encontrar temas como India o Sister Europe (ésta con un sonido decadente) que ya nos dejan un estupendo sabor de oido.
Tampoco hay que olivdarte de Imitation Of Christ y Falll que también están en la primera cara junto con la punkoide Pulse que tiene una descarga contenida.
En la cara b comienza muy la la cosa.
We Love You es una gozada  de principio a fin. Post Punk de alto voltaje.
Wedding Song tiene una base rítmica con un sonido que me me parece buenísimo y unas estupendas guitarras.
Tal vez no sea para una boda tal como dice el título pero es un buen tema.
Sigue fuere la cosa con Blacks/Radio. Casi 7 minutos de intensidad y que el minutaje no hace que se pierda el interés en ningún momento.
Se cierra la cara con la potente Flowers para darle un buen final a este estupendo trabajo de los chicos.
La producción del disco estuov a cargo del famnos Steve Lillywhite. Un imprescindible en aquellos años.
Tampoco me gustaría olicdar de Duncan Kilburn que aporta mucho a algunos temas con su fenomenal saxofón.
Y como curiosidad es que la portda se puede encontrar en varios colores.