Oblique vuelve con esta versión del canadiense que, la verdad, tuve que escuchar porque no tenía ni idea de su existencia.
Dicho esto, prefiero estar versión que se han marcado los chicos de Oblique. Que no es que la de Bieber sea un mal tema. Es un tema Pop que no disgusta. Pero aquí hay lo traspasan a ese Synth Pop un tanto ampuloso y sobrecargado de los 80 que le siente muy bien porque suena acogedor y los teclados te arropan. La voz de Sonja te acaricia y te susurra a los oidos.
El duo sigue con este Synth Pop acogedor, sean temas propios o ajenos que suena de maravilla.