domingo, 4 de mayo de 2014

THE GRID - 4,5,6

El segundo álbum de The Grid tuve que escucharlo detenidamente para saber con lo que me encontraba.
En las primeras escuchas no era un mal disco, ni mucho menos, pero no me parecía tan fenomeal como su debut Electric Head.
Publicado en el año 92, Dave Ball y Richard Norris parece que aparcaron momentáneamente su lado más Techno House, aunque lo hay, para ofrecernos un trabajo con más Downtempo y con más pasajes ambientales.
Es justo reconocer que está más elaborado en todos los sentidos que su predecesor, aunque no sea tan pegadizo e inmediato.
Al Cesar lo que es del Cesar.
En este disco están las colaboraciones de Sun Ra, Dieter Meier (Yello), Robert Fripp y Andy Mckay (Roxy Music) entre los más destacados con buenos resultados.
Para mí la joya oculta y lo mejor del disco es Hearbeat. Tema para caerse de espalda. Un medio tiempo ambiental, romántico y desvastador cuando llega ese saxo de Andy Mckay.
Un tema que me trae a la memoria el Drip Dry Eyes de Yukihiro Takahasi.
Los Grid de siempre están presentes en temas mágnífcios como Crystal Clear, Figure Of 8, Doom! o la impactante Fire Engine Red con coros y fondo Funk.
Los clubs, la fiesta el baile siguen presentes en las mentes de los músicos.
Ice Machine sigue la estela de Yello y por eso es normal que esté aquí Dieter Meier. Sonido frío y robótico.
Tampoco se olvidaron de los sonidos cyberdélicos, aunque algo más ambientales y bajos de BPM como puede ocurrir en Aquarium o Leave You Body.
Y algo bueno es que al disco no le han pasado los años por encima. Puede que refleje los años en los que se grabó, pero sigue sonando fresco.
No se debe de dejar de escuchar.

SUN ELECTRIC - KITCHEN

Kitchen es, para mí, uno de esos discos imprescindibles cuando hablamos de los electrónica de los 90.
Los alemanes debutaron en el 93 con este disco que no tiene desperdicio alguno.
En él se encuentra el fenomenal y emblemático tema Beauty O´locco, tema impresionante que fue todo un hit dentro de los clubs y de los ambientes electrónicos en su momento.
Pero sería muy injusto hablar de Sun Electric sólo por dicho tema.
El Techno, el Ambient con bastante sabor a los correos cósmicos y el Trance recorren todo el disco.
Aún así, no es un disco de baile propiamente dicho aunque tenga sus momentos, por lo menos no para mí.
Es un trabajo que se debe de escuchar detenidamente para encontar todo lo que él hay. Porque más alla del esqueleto rítmico de cada tema, hay una sorprendente variedad de melodías, de estructuras, que van conformando toda una arquitectura  rica en sonidos y en ambientes.
De tal manera que Sun Electric nos ofrecen un trabajo que se puede escuchar desde diversas perspectivas, pero que todas confluyen en una sóla. Y es la de que al escucharlo te estás dando cuenta que te estás adentranto en un mundo que ellos han creado y diseñado para ti, para que lo disfrutes, para que se sumergas en su mundo y te apartes por un tiempo del mundo real.
Por eso, el hecho que haya aquí Tecno y Trance, no se debe de ver como un disco para pastilleros poligoneros. Nada de eso. Es más, aunque suene un poco pretencioso, diría que aquí hay mucha música destinada a paladares selectos y a oidos finos.
Beauty O´locco, Sonification, Osran 509 o Entrance, son prueba de ello.
Una producción impecable, con un sonido claro y cristalino.
Y para terminar diré que, según leí en su momento, el título Kitchen, tiene mucho que ver con el hecho de que gran parte del disco se gestó en la cocina de uno de los miembros.
Un disfrute para melómanos de la electrónica.

ESPLENDOR GEOMETRICO - EG1

Muchas veces se juntan diversas circunstancias que hacen que un servidor se acuerde de determinados discos.
Sirva esta entrada como pequeño homenaje a Sthalfabrik pues su tremendo blog  ( tiene más), WET DREAMS ha llegado el pasado día uno a las 250.000 visitas.
Mi reconocimiento, pues no os creáis que es nada fácil llegar a ese número de visitas con un  blog como el suyo.
Que nadie lo interprete mal. Su trabajo es tremendo, su discoteca inmensa, pero lo que en Wet Dreams puedes encontrar no es apto para cualquier tipo de oido.
Su propuesta Industrial, Electrónica e incluso Minimal Synth no es para audiencias masivas, sino es una maravillosa propuesta para todos aquellos que les gusta buscar nuevos retos dentro de la música, la electrónica especialmente,  pero que si eres inquieto musicalmente y quieres aprender, este blog se hace imprescindible.
Espero que siga muchos más años.
Y me meto en el disco.
Esplendor Geométrico no necesita presentación, o eso creo. Pero si la necesitara, sin ser yo nada experto en música industrial, diría que seguramente que sin el mejor grupo de la historia, sí que está entre los tres primeros.
Este trabajo apareció originalmente en formato cassete alla por el año 82 que era el formato más asequible por aquellos años para editar sus trabajos de forma casera y autónoma.
No hacía mucho que los tre miembros primigenios de la banda, (Arturo Lanz, Gabriel Riaza y Juan Carlos Sastre),  se había marchado del Aviadro Dro por desavenencias con respecto a la dirección que debía de llevar el grupo.
Grupos como Cabaret Voltaire, SPK o Throbbing Gristle fueron sus grupos de cabecera y referentes para elaborar su propio sonido.
Esplendor Geométrico comenzaron a machacarnos los oidos con trabajos como éste.
Aquí podemos encontrar la celebérrima y clásica Destrozaron Sus Ovarios, un clásico y una obra maestra del género industrial.
Porque ese es el sonido que vamos a escuchar durante todo el disco sin concesión alguna.
Máquinas, industria, frecuencias de radio, pistones, turbinas, presión y casi desasosiego se encuentra aquí.
Y sin embargo, Esplendor Geométrico consigue avasallarte de tal manera con su música, que una vez que la das al play de tu reproductor, es muy difícil que te atrevas a pararlo.
Muerte a Escala Industrial, Amor en Mauthaussen o El Cabecilla del Vaticano son más temas que se encuentran en este trabajo sin desperdicio.
Las letra, al igual que algunos de los títulos, sin puramente provocadores. Propios de un grupo que intentaba abrirse camino y marcar su territorio marcándolo claramente.
Un grupo mucho más conocido y aclamado fuera del país que dentro, algo que suele pasar frecuentemente.
Y sin lugar a dudas un grupo referente de miles de grupos industriales, y no tanto.