Mostrando entradas con la etiqueta Bebop. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Bebop. Mostrar todas las entradas

martes, 4 de mayo de 2021

THAD JONES - MEL LEWIS - CONSUMMATION

Líderes de sus respectivas bandas, trompetista y baterista se reunieron a lo largo de su vida para hacer discos y conciertos a modo de las big band de los años 30 y 40.

Este disco se editó en el 70 por el sello Blu Note, y es de esos disco que cuando lo escuché si que había la parte de Big Band, pero con sonido moderno y actualizado. Pero también m e vinieron esos recuerdos de las bandas sonoras de los telefilms de aquella década que veía por la televisión.

Claro que hay Jazz, la base principal, pero también hay momentos que se podrían aproximar sin problemas al Soul y en algún momento podrías oir mini retazos de Funk, 

Es verdad que las Big Band habían pasado a la historia y también es cierto que el Jazz seguía en contínua evolución, absorviendo y siendo absorvido por otras corrientes musiclaes, con lo cual no estaba estancado. Ellos consiguen mantener este espíritu pero mirando hacia adelante.

Puede que no sea un álbum de esos míticos dentro del género. Tampoco importa. Es un disco que pones y se te pasan los minutos volando. 

No pido mucho más.

viernes, 10 de julio de 2020

BUD POWELL - THE AMAZING BUD POWELL

Hacía tiempo que no ponía nada de Jazz.
Powell es considerado uno de los padres del Bebop y no seré yo el que diga lo contrario y máxime escuchando este disco que se editó en el 55.
El pianista da rienda suelta a su calidad como músico e interpreta canciones propias y ajenas.
Como digo siempre en estos casos, no sé si es su mejor disco. Ni siquiera si está entre lo más granado de su discografía.
Simplemente lo escucho, lo disfruto y me interesa lo que hay en los surcos.
Hay temas que me parecen modernos de narices para el año en que fue grabado.
Otras veces se acerca más a los estándares del género.
No importa. Estoy aprendiendo y simplemente puedo recomendar este disco.
Curioso que ya en la edición original apareciesen tomas distintas de un mismo tema o tomas de distinto máster.
Eso nos puede dar también una idea de que un tema en manos de los músicos de Jazz nunca sonaba igual dos veces.
Y en este caso en las manos del pianista Bud Powell.
 

sábado, 15 de noviembre de 2014

JOHN COLTRANE - COLTRANE

Hay varias variaciones de las portadas dependiendo del sello y del año en que se haya reeditado.
Yo puse ésta que es la que tengo. Una reedición que incluye un tema más de las sesiones originales de grabación.
Como dije en la anterior entrada no soy experto en el mundo del Jazz.
Lo reitero, porque estas grabaciones esta DMM, es decir, Digital Metal Mastering, una técnica que muchos entendidos en la materia dicen que se pierde la calidad original de la grabación.
No lo sé, y no lo discuto. Sólo puede decir que a mí este disco, técnicamente hablando, me suena a las mil maravillas.
Claro que nunca he podido escuchar en mi plato el disco original, que es de 1957.
Fuera de eso, nos encontramos ante el primer trabajo de Coltrane con su nombre en la portada.
John Coltrane me gusta. Los discos que tengo de este músico me hacen disfrutar de su música.
La forma de tocar, esa pasión que transcurre por cada tema, esa técnica de todos los músicos que estaban presentes. Todo hace que mi gusto por este músico vaya en aumento.
Es más, las improvisaciones que muchas veces aparecen durante los temas, debido a la calidad de los músicos, da la sensación de que estaban previamente escritos en un pentagrama.
John Coltrane no es uno de los músicos del Jazz moderno por casualidad.
Como tantos otros en aquella época, rompieron moldes e intentaron buscar nuevas vías para expresarse y que el Jazz no se quedara encorsetado.
Padre del Free Jazz, merecidamente otorgado por lo que he oido de él hasta la fecha, Coltrane siempre estuvo en la búsqueda y el vanguardia.
Este disco era un comienzo, pero un comienzo esperanzador y fantástico.
Temas como Bakai o  While My Lady Sleeps demuestran la versatilidad de un músico que ya está en la historia del género.

MILES DAVIS BIRTH OF THE COOL

Un buen disco para escuchar tranquilo en casa con la que está cayendo por estas tierras.
Un cafelito, un pitillín, y la exquisita música de este genio del Jazz.
Escribo esta entrada mientras estoy escuchándolo en vinilo de 180gr. Creo que es como se disfruta más.
Sin embargo, esto se puede disfrutar siempre y en cualquier formato.
No soy muy conocedor de Jazz. Compro últimamente discos, reediciones de clásicos, que la verdad es que están muy bien de precio.
Así que no voy a poner muchos datos técnicos del disco.
Aunque algunos temas ya habían salido de forma individual anteriormente y en e 54 salió un disco con ocho temas, no fue hasta el año 56 cuando salio el disco con los 11 temas de las sesiones de grabación.
Grabaciones que, curiosamente, se habían hecho entre el año 49 y 50.
Como siempre las discográficas no sabían lo que tenían, pues si no es por la repercusión que ya tenía Davis por aquel entonces, seguro que hubiesen tardado décadas en salir.
Ya Miles apuntaba maneras, y así este trabajo está considerado como un disco fundamental para lo que sería el Jazz Moderno.
Rodeado, como él de músicos jóvenes, rompieron las estructuras.
Y fuera de todo eso, lo importante para mí, es que cuando me decidí a comprar este disco, habiendo antes leido un poco sobre él, sobre los más importantes del músico, no sé si es que te autoconvences, si ya te pones delante de él un poco condicionado, pero te das cuenta de que estás escuchando algo importante, distinto.
Distinto porque este disco va camino de cumplir los cincuenta años, (bueno las grabaciones como tal ya tienes algo más), y te das cuenta que sí que debió de romper moldes.
Y la verdad es que sigue sonando fresco, fresco, como una rosa el condenado.
Aquí hay clásicos como Jeru o Israel, pero lo mejor es que pasan los minutos y disfrutas todo, cada segundo, cada intrumento, cada melodía.
Porque siempre me he preguntado porque los discos de Jazz suenan de maravilla, grabados con pocos recursos. Y es que puedes distinguir fácilmente todos los intrumentos, y en tu amplificador apenas tienes que modificar graves o agudos.
No me lío. Termino el café que empecé, termino esta entrada, y saboreo este Birth Of The Cool, que la verdad es que me hace sentir muy Cool.

sábado, 4 de octubre de 2014

IBERICO JAZZ - CALANDRIA RECORDS - LAS GRABACIONES DE ANTOLIANO TOLDOS (1967-1972)

Hay sellos que me gustan. Vampisoul es uno de ellos. Independientemente de que te guste o no todo lo que publiquen, hay que reconocer su valor por todas las grabaciones que han rescatado del más absoluto olvido.
Es más, algunas, como ésta que aquí os traigo ahora, no tuvieron repercusión ni cuando salieron en su momento al mercado.
Antoliano Toldos creo un sello discográfico en el que editó varias referencias. Había Cha-cha-chá, Boleros, Rumbas, pero también editó varias grabaciones de Jazz, que se recogen en su totalidad en este disco, y que a Antoliano le gustaba.
Hago un paréntesis antes de seguir hablando de este disco.
Se puede decir que el sello fundado en los sesenta, Calandria records, es realmente, no sé si el primero, pero sí de los primeros sellos independientes de este Estado.
Si se tira hacia atrás se puede comprobar que muchas cosas que nos parecen relativamente recientes, no lo son realmente tanto.
Volviendo al disco, me di cuenta cuando lo escuché por primera vez de algún detalle que para mí es importante.
Más allá de si los temas son mejores o no, que para mí lo son, más allá de si son reflejo de una época o suenan más actuales, lo realmente importante es que te das cuenta de que los músicos que aquí participaron, estaban muy atentos a todas las corrientes jazzísticas que venían de fuera de las fronteras hispanas.
También me di cuenta de que la grabación es formidable. No me cabe ninguna duda de que tuvo que haber un proceso de remasterización para mejorar el sonido, pero sin tener datos, seguro que los masters debían de estar en muy buenas condiciones para que el resultado final haya quedado tan óptimo.
El título creo que desvela lo que vamos a encontrarnos. Jazz, Bebop, y sin ánimo de excederme,  algo de Jazz Funk.
Una soberbia colección de temas, que gracias al sello Vampisoul se pudieron volver a disfrutar en el año 2009 que es cuando se editó este trabajo.
Un trabajo que si no te gusta e Jazz pues no le vas a prestar atención. Si no tienes fobias a nada, pues te recomiendo que lo escuches. Para mí no es sólo que me guste, sino que me parece un documento sonoro básico, para entender un poco más lo que ya sabemos muchos, que siempre prensamos que lo de fuera es mucho mejor, pero que en España también se han hecho cosas estupendas.
Minoritarias, underground, pero había.