martes, 28 de febrero de 2017

ESKMO - ESKMO

El tiempo pasa que uno no se entera.
Este disco ya tiene siete años. Lo descubrí gracias a un blog ya desaparecido. Una pena era muy interesante y ponía cosas como ésta y otras más.
En fin, Eskmo es el seudónico del estadounidense Brendan Angelines.
Este fue su cuarto disco, pero el primer en ser editado en un sello como es Ninja Tunes, con lo cual uno gana enteros sólo por eso.
De entrada decir que sólo por un tema como Cloudlight ya vale la pena hacerse con el disco.
Una gozada electrónica donde hay frialdad, emoción y también pasión y muchas cosas más. Sonidos poliédricos sobre sentimientos. Sin desperdicio.
Por fortuna hay otros temas como We Got More donde uno puede apreciar el baile desde un punto de vista mécanico y repetitivo. Otra gozada.
El Glitch, el Donw tempo y el Dubstep tiene cabida a lo largo de todo el disco.
Pero sobre todo es un disco muy electrónico. A mucho puede no gustarles que yo haga esta definición, pero es la verdad.
Sonidos del siglo XXI donde la electrónica es un fin no un medio. Otra cosa es que gusten más o menos los estilos aquí practicados.
No se trata de un disco de baile al uso. Sí, se puede bailar, pero también se puede disfrutar en casa tranquilamente.
The Melody es otro estupendo tema. Bases potentes, mecánicas, donde los sonidos se retuercen pero de manera sosegada y donde las voces forman parte de esos sonidos.
We Have Invisible Friends refleja realmente éso. Sonidos atmosféricos y poliédricos sobre bases percutivas como pálpitos en estado de ansiedad. Grande también.
Otro tremendo tema es Moving Glowstream es otra gozada tipo Cloudlight y We Got More. Como si ambas se hubieran mezclado y transformado por si sólas en un nuevo tema. Alucinante.
Así que no tengo más que recomendar este disco.
Una portada preciosa y etére. Unos sonidos electrónicos poliédricos y que al mismo tiempo logran transmitir algo más que frialdad.
Sonidos electrónicos del nuevo siglo que francamente suenan magníficos.

DAVID BOWIE - EARTHLING

Este trabajo del 97 de Bowie es realmente una pasada y creo que es uno de esos discos que los años lo deben de poner en su sitio dentro de su discografía.
Esta vez puede que pasara a la inversa. Bowie no iba por delante, pero sí que supo hacer algo que pocos saben.
Absorver lo que se hace en el momento y pasarlo de manera formidable por su licuadora musical y quedar una disco genial.
Porque la facilidad con la que el Camaleón (por algo lo llamaban así), supo combinar unas dosis de Drum And Bass, de Jungle e incluso de Techno con una guitarras pesadas y afiladas es digno de admiración y también de darse cuenta que no está al alcance de todos.
Nadie esperaba esta jugada del músico. Sinceramente yo tampoco. Bowie llevaba una discreta discografía desde Scary Monters y nada parecía presagiar algo novedoso.
Pero nos equivocábamos todos.
Un trabajo que por temas como Little Wonder, Battle For Britain o Law ya valdría la pena escucharlo.
Pero es que el despliegue de temas es bárbaro.
El sonido pesado de las guitarras es tremendo. Más potenten que cuando creara Tin Machine.
Donde va a parar!
El comienzo Techno de Seven Years In Tibet que termina en tema Hard Metal es tremendo.
Dead ManWalking es puro Techno directo a las pistas que sólo la voz de Bowie suavice la potencia terrorífica. Pura delícia sintética.
I´m Afraid Of Americans roza casi el Industrial. Metales pesados y guitarras con una dureza bestial.
En fin un discazo como la copa de un pino y lo mejor que hizo desde hacía años.