viernes, 23 de agosto de 2013

THE BEATLES - REVOLVER

Hablar de un disco de The Beatles es fácil, pero tal vez en un blog como éste no lo sea tanto.
Comentar las grandezas de sus trabajos no entrama ningún problema.
Pero sé que muchos de los que siguen el blog, pues como que estos chicos les traen al pairo o, o directamente, los odian.
Mi pasión por el grupo surgió hace muchos años, pero menos de los que cabría esperar.
Fue casi por casualidad, ya que hasta que profundicé realmente en sus discos, siempre había pensado que eran cosa del pasado.
Un pasado igual que para mucha gente joven supone que hablemos de discos de los ochenta.
Siempre he tenido dudas existenciales si éste es el mejor disco de ellos, o lo es Sgt Pepper.
Por los dos siento adoración, pasión y respeto.
Revolver es de ese grupo muy selecto que creo que revolucionaron el Pop allá por los sesenta.
Habían dejado de hacer giras ante la imposibilidad de poder plasmar las ideas y sonidos de los discos en directo, aparte de que su giras eran multitudinarias, llenas de fans que apenas dejaban oirse entre ellos, etc, etc.
En el 66, con los estudios Abbey Road a su disposición disponibles las 24 horas del día, el grupo disponía de tiempo suficiente para plasmar sus ideas en disco.
Para mí, al márgen de los buenísimos temas que tiene el disco, y que considero una obra maestra, este disco puede que sea de los primeros que acercaron cierta experimentación creada en los estudios de grabación a masas de oyentes.
Y me explico.
Aquí hay primitivos loop, de los que se hacían con cintas y que uno tenía que aguantar un extremo.
Después había que cortar, incluso con tijeras, y ensamblar manualmente.
Vamos orfebrería sonora. Cuando un cuatro pistas era la releche y los ingenieros de grabación eran verdaderos inventores.
I´m Only Sleeping es uno de esos temas con guitarras al revés y manipulación de velocidad.
Incluso un tema de corte infantil como es Yellow Submarine contiene muchos sonidos y ruidos que antes no eran nada habituales en el mundo del Pop.
Pero la joya de todo ésto se lo lleva Tomorrow Never Knows. Una joya dentro de la discografía del grupo y todo un alarde de experimentación en un estudio en los 60.
Según cuenta, para Lennon, autor real del tema, la palabra imposible no existía en su diccionario musical. Así que siempre confiaba en el bueno de George Martin y sus ingenieros para resolver las situaciones más difíciles e incluso surrealistas.
Tomorrow Never Knows se mueve sombre y base bajo-batería monótona y monocorde, pero mántrica a todas luces, y de repetente podemos oir sonidos al revés, sonidos deformados, ralentizados, apresurados, y un procesado de voz que cincuenta años después suena de inmaculado.
No eran los primeros, ya había gente manipulando aparatos en sus laboratorios, pero sí acercaron estos sonidos al gran público, como dije al principio.
Y es que tanto Lennon como Mcartney estaban muy atento a las vanguardias sonoras.
De hecho Mcartney estuvo interesado en los trabajos de gente como Stockhausen.
Aparte de todo, los chicos tenían una facilidad increíble para tejer melodías memorables, perdurables en el tiempo, a la par que siempre intentaban aportar instrumentos, sonoridades nuevas en sus trabajos. La sicodelía empezaba a hacer furor en el mundo y ellos también reflejaron parte de ese espíritu.
Harrison, por primera vez, deja tres temas de cosecha propia, tal vez demasiado eclipsados por los de sus compañeros, muchos no se dieron cuenta de que fue él que incorporó sonidos e instrumentos indús a la música popular europea.
Y Love You To así lo refleja.
¿Y Taxman? pues para mí, que queréis que os diga, me parece un tremendo pepinazo de Funk Pop de mucho cuidado, con un bajo como sólo Macca podía hacer.
Sonidos de música clásica (Eleanor Rigby) sonido Motown (Got To Get To Into My Life) y Pop de sobresaliente es lo que en este gran, gran disco podemos encontrar.
La portada pues también ya es de las míticas dentro de la música, a cargo de Klaus Voormann.
Y para finalizar, una gran recomendación. Escucha este disco en mono, que es como realmente se grabó.
Sí, se que suena muy arcaico, de fundamentalista estúpido del sonido, pero es que, repito, fue así como se grabó.
El grupo estaba siempre presente en las mezclas finales del disco. Eran muy críticos con el resultado final. Pero tal como lo habían grabado ellos, que era en mono.
Para las mezclas en estéreo no estaban nunca presentes, se desentendían.
Y es que pienso que cuando, estamos hablando de los años 60, las técnicas aún eran muy rudimentarias en los estudios de grabación. Tú mismo, tienes más posibilidades con la tarjeta que tiene tu Pc, que la que ellos tenían.
Así que el estéreo esa más por la novedad y por vender más, que por lo que podía aportar musicalmente. De hecho, las nuevas remasterizaciones que se hicieron hace unos años de la discografía del grupo, mejora bastante ese estéreo.
Que yo tengo un disco de un grupo, que no voy a citar, en 5.1, y que originalmente se grabó en mono, que el punto siempre se lo econtré, pero el 5, pues como que no.