sábado, 25 de noviembre de 2017

SHE PAST AWAY - NARIN YALNIZLIK

Segundo disco editado en 2015 de estos turcos que practican una estupenda música Gotica y Darkwave.
Su sonido no varía con respecto a su primer trabajo.
Los sonidos Darkwave y góticos siguen presentes en todo momento.
Independientemente de que no hubiesen cambiado sus planteamientos, lo importante es que sus temas siguen sonando muy bien.
Asimilasyon, Katarsis (genial tema) o Uctu Belirsizlige son excelentes muestras del potencial del grupo así como su capacidad para seguir creando canciones densas y con sonidos siniestros.
Puede que no sea tan impactante como su disco de debut, pero hay que reconocer que con este disco consiguen que uno mantenga el interés por lo que hacen.
De esos grupos que uno descubre gracias a las redes y que queda gratamente sorprendido.

LOS PASAJEROS - HISTORIAS QUE CONTAR



Los Pasajeros han vuelto a la actualidad con este magnífico single que dará mucho que hablar entre los circuitos más Synth Pop y underground.
Historias Que Contar es unda delicia de tema que va ganando a cada escucha.
Es una descarga y una intensidd que se va apropiando de ti irremisiblemente.
La voz de Victor M. Pacheco es suave. Desprende una melancolía y una emoción de lujo sobre una capa de sonidos brillantes y un tanto Dark.
Una letra triste nos cuenta mucho en poco más de tres minutos.
En la cara b sigue esa onda oscura pero deliciosa a cargo de una apabullante versión de un tema magnífico de la primera etapa (la buena para mi) de Danza Invisible.
Los Pasajeros cogen a El Angel Caido y no es que lo actualicen, es que lo revitalizan de una manera asombrosa, siendo para mí mejor casi que el original.
Mezclado por ellos y masterizado por O Mestre Misterfly. Poco más que añadir en este aspecto.
Este single es un gran y un estupendo paso hacia adelante de Los Pasajeros, no es que hayan cambiado radicalmente, pero sí que el sonido se ha tornada más grueso, más profundo y si cabe un poco más oscuro que francamente produce unas sensaciones difíciles de describir.
Una capa de tristeza te aprisiona y sin embargo no quieres que sa vaya nunca.
Esperando el disco grande como agua de mayo.


RAIN TREE CROW - RAIN TREE CROW

Este disco es de los típicos que te das cuenta de su valor con el paso de los años.
Puede que Rain Tree Crow no le diga nada a muchos, pero si decimos Japan ya es otro cantar.
Y sí, Rain Tree Crow son los miembros de Japan reunidos diez años después bajo otro nombre. En el 91 se editó.
Desde luego que muchos lo podrán ver como una falta de interés económico por no volver con el nombre del grupo que los hizo relativamente famosos para los comunes y muy bien vistos por la crítica especializada.
Pero creo que fue un acto de dignidad por parte de todos.
El sonido ya poco tenía que ver con el grupo de antaño.
Son un grupo de amigos que, entre Karn y David, limaron asperezas pasadas, y se reunieron supongo que para pasar un buen rato y también depaso dejar evidencias de que cada uno había evolucionado como músicos y musicalmente hacia otros terrenos.
Y es que este disco es una auténtica gozada de principio a fin. Una delicia para los sentidos.
El sonido evidencia la evolución antes comentada por todos.
David tiene una voz más profunda y maravillosa. Los temas nos podrían acercan más a lo que hacía Karn en solitario.
También lo otros dos miembros (Richard Barbieri y Steve Hansen) dejan patente su calidad no sólo como músicos, sino como parte compositiva del grupo. Todos están firmados en conjunto.
Nadie destaca. Todos funcionan con la perfección de antaño, incluida esa producción de lujo.
Rain Tree Crow se mueve por los mundos de un Art Rock  progresivo de verdad. Un ambient no de libro pero si delicioso. Y una experimentación nunca salvaje pero si buscando nuevos caminos de expresión.
El álbum se mueve por los terrenos siempre de la calma, el sosiego, pero no pierde nunca intensidad.
Temazos como Pocket Full Of Change  o Blackwater son una auténtica maravilla.
Sin olvidarse de muchos otros como pueden ser Big Wheels In Shanty Town, Scrtchings On The Bible Belt o New Moon At Red Deer Wallow.
Fue la única reunión como grupo. Si bien siempre colaboraron los unos con los otros para los diferentes trabajos en solitario o bien como duos entre Barbieri y Jansen.
De esos discos que hay que reivindicar y no olvidarse de que se editaron aunque pasaran de puntillas.