Adelanto que no voy a ser nada objetivo. Glamour son de esos grupos que te marcan, que se hacen imprescindibles, que siempre que los pones sigues disfrutando igual que el primer día. O mejor, pues pasados tantos años anilizas su música, sus letras, y resulta que te siguen transmitiendo esa descarga de sensaciones como cuando eras un quinceañero.
Estos discos son los que para uno marcan la diferencia.
Su primer disco, editado en el 81 ya era buenísimo y también imprescindible.
En el 83 volvieron con esta joya en donde dejaban claro el porqué no tuvieron el éxito que se merecían.
Y es que no los merecía era un país como en el que estaban.
Demasiado modernos, demasiado europeos. Un sonido con muchas influencias, unas individualidades con gustos distintos, pero una en común. Hacer temas soberbios.
Si en Imágenes quedaba algo por pulir, aquí lo hacen y consiguen algo exquisito.
En este disco es de los pocos en que sí que se hace imprescindible seguir y concer las letras.
Amores rotos, desamor, tristeza, angustias, depresiones, todo ello se reflejan de una manera tal que hace que TU seas el personaje de la historia. Y si ahora siguen teniendo sentido para mí, no te digo cuando eres un jovenzuelo.
Por los surcos corren influencias varias. Japan, Bowie, Magazine, Duran Duran, Ultravox.
Intento Olvidar, el primer single, es un trallazo demoledor para que estés triste y odies recordando mientras bailas.
Guarda Tus Lágrimas, con un aire muy Duran Duran, es un pepinazo que de haberse editado en inglés habría sido un éxito total en Europa. Bajo demoledor, sintetizadores abrumadores, batería perfecta, guitarra impecable y la voz de Luis Badenes dejando su encanto.
Volverá, Contrafuego, Savoir Faire, Pasan Las Horas, Después de Ti, Hombre de Metal. Todas sin impecables, no hay fisuras. Son inmaculadas.
Y dejo Tanto Tiempo (Tan Distinta) para el final. Una obra maestra sin paliativos. Si ya el disco pasó bastante desapercibido, menos en Valencia, no os digo ya un tema que no salió como single en su momento.
Un tema que es perfecta. Unos teclados ensoñadores y arrebatadores flotan durante todo el tema. El bajo espectacular, la guitarra impresionando, la batería te hace bailar mientras bailas y lloras mientras Badenes nos relata una historia que se nos hace cercana. Una historia que no tiene edad.
Esa persona que idolatras, que amas, que darías lo que fuera por estar con ella, pero realmente no la conoces. Haces tus propias historias y compones tu propio mundo con ella.
Cuando consigues estar con ella, pasa el tiempo y te das cuenta que no es como en tu historia, que tu cuento era mucho más bonito que la realidad. Y la realidad te pega una buena bofetada en todo tu ser.
Como habéis podido comprobar, mi devoción por Glamour va más allá de grandes canciones o buenas letras.
Los sentimientos que me produjeron, y me producen aún a dia de hoy, escuchar este disco (y el primero) no se pueden describir por mucho más que escriba.
Luis Badenes escribió hace poco al Blog para darme las gracias.
¡Dios mío un Glamour dándome las gracias! No soy de idolatrar a nadie, pero estas cosas me siguen haciendo feliz.
Las gracias a que dárselas a ellos, a Glamour, por haber hecho música com la que hicieron.
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