lunes, 12 de mayo de 2014

KRATWERK - AUTOBANH

En el año 74, Kraftwerk dieron un salto significativo a las listas de éxitos, (algo inesperado),  y con este disco, empezaron su andadura con lo que antaño se denominaba álbum concepto.
En las listas de éxito porque, aunque fuera sorprendente, lograron poner la vesión single del tema Autobanh en las listas de Estados Unidos.
Kratwerk han estado siempre mucho más atentos a todo el mundo de la música de lo que todos nos creemos.
Aislados pero no tanto como nos hacían pensar.
De hecho, según leí, ellos querían ser como unos Beach Boys electrónicos.
Así, el teman Autobanh, cantada en alemán, tenía momentos en que parecía que decían Fun, Fun, Fun, como los chicos de la playa.
Personalmente creo que fue su primera media obara maestra, ya que la cara A del Lp nos muestra un viaje a través de las autopistas de su país desde que entramos hasta que salimos de ella.
Un viaje que descriptivo y realista como pocos se han hecho.
Lo pasamos bien, vamos por la autopista, adelantamos, nos pitan, vemos el paisaje y finalmente llegamos a nuestro destino.
Todo lo describen con una claridad pasmosa.
Siendo estrictos no podemos decir que el disco sea aún electrónico al cien por cien, pues aún hay guitarras y violines electricos a cargo de Klaus Roeder que fue por un tiempo miembro del grupo.
A éste también se incorporaba en la percusión electrónica Wolgan Flur que estaría hasta Electric Café y forma parte de la histórica y más productiva época de los alemanes.
La cara b contiene cuatro temas que no están relacionados con el mundo de la automoció ni con las autopistas.
Kometenmelodie consta de dos partes. Una mucho más experimental y la otra con un sabor más divertido y si me apuras bailable. A mí me gusta mucho esta segunda parte, pero a muchos seguidores del grupo les acerca peligrosamente a un Jean Michel Jarre.
Mitternach se adentra en la experimentación de sus comienzos y en el sonido de los Correos Cósmicos.
Morgensaziergan con flauta eléctrica es un tema relajado, con sonidos que recuerdas a un paseo por el campo. Tranquilo y reposado que podría recordar a trabajos hechos treinta años después y que se le puso la etiqueta de Ambient.
Fue un trayecto por la autopista brillante. Y también fue el despegue definitivo del grupo que, a partir de este disco, (Desde Radioactivity hasta Computer World), nos dejaron cuatro obras maestras adelantadas todas a su tiempo.
Por ello son los grandes de la electrónica mundial y un referente para todos.



domingo, 11 de mayo de 2014

STROMAE - PAPAOUTAI

Stromae es un mozalbete belga, que tiene influencias de la música electrónica y del rap.
Sólo lleva editados dos álbumes que han tendio mucho éxito en Europa.
Lo que he escuchado de él no me parece bueno ni malo. Ni me desgrada ni me encanta. Salvo este tema de su último disco.
Papaoutai es un tema que me parece tremendo, al igual que el vídeo.
Empieza como chansón francesa, tiene sonidos de corte africano, y todo ello se gunta con sonidos electrónicos muy asequibles y con al de rap.
Pero sobre todo es el estribillo lo que me llamó la atención.
Es pegadizo y tiene fuerza.
Por eso es por lo que pongo aquí esta entrada, pues el tema no para de sonar en mi cabeza desde hace unas semanas.
Es más, la voy a poner dentro de mis Canciones del Armario, porque seguro que alguno puede sentir verguenza ajena cuando lea esto.
Ventas y basura no siempre tiene porque estar unido aunque, por desgracia, suela ocurrir.

LIARS - MESS

Al igual que pasó con Faint, ese disco es otro de los que me propuso escuchar el seguidor del blog Cesar.
Nunca había escuchado nada del grupo, pero como sabéis que me gusta indagar un poco, resulta que a lo largo de su carrera han ido buscando nuevos caminos sonoros y que poco a poco se han ido adentrando en la utilización masiva de sintetizadores.
El grupo se formó en New York y estaban enmarcados dentro del Post Punk/Dance Rock.
El disco salió hace un para de meses y no me importa reconocer que ha sido un agradable descubrimiento.
Desde luego el trío se ha olvidado totalmente de las guitarras y han cogido las máquinas como medio de expresión.
Como no he escuchado nada anteriormente del grupo, no pued decir si el cambio les ha sentado bien o mal. A mi desde luego me gusta lo que he escuchado.
Los cuatro primeros temas podrían encajar perfectamente en cualquier club que se arriegue en hacernos bailar con propuestas no convencionales.
Suenan duros pero no pesados. Por momentos ese Dance Rock parece que se quiere colar en una EBM no clásica, pero seguro que podrían pasar por ella tranquilamente.
No obstante, yo lo veo como un grupo utiliza la electrónica como un fin, más que como un medio.
Quiero decir que Liars mañana puede volver a utilizar guitara y batería para hacer su siguiente trabajo. Lo cual no significa nada más que van a utilizar la instrumentación que consideren necesaria en cada caso. No se van a ceñir a nada más que a lo que ellos quiera. Lo cual está bien.
Después de los cuatro primeros temas, que como dije se mueven en una onda bailable pero dura y enigmática, el resto del disco se mueve por otras formas de expresión menos accesibles pero igualmente válidas e interesantes.
Más búsqueda de sonidos y caminos experimentales con, bajo mi punto de vista, buenos resultados.
Un disco que recomiendo, al igual que hizo Cesar en su momento, porque seguro que os hace pasar unos buenos momentos.
Además, me gustan grupos como Liars, que no se ponen límites cuando buscan nuevas formas de expresión.

sábado, 10 de mayo de 2014

THE GRID - ELECTRIC HEAD

Dave Ball y Richard Norris, o lo que es o mismo, The Grid, debutaban en el siglo pasado, 1990, con el mejor disco de toda su discografía, que ya de por sí es buena.
Podríamos decir que estos ya veteranos de la música por aqueños años, recogieron la esencia de todo lo que se estaba haciendo por aquel entonces dentro de los sonidos electrónicos más actuales y lo escupieron en este Electric Head.
Techno, House, Electro, Synth Pop e incluso pequeñas dosis de Ambient y Electrónica están presentes durante todo el disco.
Como un trabajo de su época, está orientado preferentemente al baile, pero también hay momentos para la calma.
Así, la primera cara empieza de forma más tranquila y ambiental para ir poco a poco cogiendo ritmo.
Temas como One Giant Step, Driving Instructor o A Beat Called Love, (esta última es la única que puede recordarnos ligermante que uno de sus componentes estuvo en Soft Cell) son muestras del universo musical electrónico que The Grid nos quieren presentar.
Pero si la cara A no es buena, la cara b ya es genial de principio a fin.
Intergalactica es un temazo como la copa de un pino con un estibillo sencilo pero arrebatador.
This Must Be Heaven es House con sabor a Funk electrónico con una melodía impecable y elegante.
Doctor Celline posee un bajo demoledor, destilando un Techno soberbio, bailable e imparable.
Strange Electric Sun suena más Electro de lo que es gracias a esa voz vocorizada que aparece a lo largo del tema. Synth Pop con ciertos aires de cabaret.
Floatation nos relaja de tanto ritmo, aunque también lo tiene, pero más pausado. Ambientes ensoñadores con un bajo sintético que lleva el peso del tema.
Y con Virtual se despide el disco, ofreciéndonos apenas más de dos minutos de electrónica espacial.
Sumemos a todo ello que, entre tema y tema, hay una serie de interludios o intermedios, que apenas duran veinte segudos, con diferentes ambientes.
Como dije un muy buen disco que nos ofrece todo lo que se hacía por aquellos años 90 en lo que se refiere a música electrónica en su vertiente más bailable.
Un trabajo vigente y que es necesario escuchar.


SOF CELL - CRUELTY WITHOUT BEAUTY

Casi veinte años después, y sin que nadie se lo esperase, el dúo británico Soft Cell se reunieron para sacar un nuevo disco y hacer unos directos.
El grupo empeza a ser reivindicado por muchos grupos como un referente. No sólo eran grupos que practicaban Electropop o Future Pop, sino otros con estilos distintos, como por ejemplo Marilyn Manson.
A todo ello debemos añadir que el Electroclash empezaba a tener mucho auge.
Un Electroclash que para mí bebía mucho del Tecno Pop de los 80, de la New Wave más electrónica y si me apuras de los New Romantics.
Vamos, un revival en toda regla, pero actualizado para los tiempos del nuevo milenio.
Vaya por delante que a mí no me desagradó nada en su momento, ni ahora tampoco.
Dicho todo lo anterior, no cabe duda de que Soft Cell tuvieron mucho que ver.
Así que, supongo que por que les apetecía, (no eran entes acabados, ni mucho menos), porque pensaron que podían volver teniendo algo que decir, y también, porque no decirlo, para darse un baño de masas y de dinero, que a nadie la amarga un dulce, se metieron en el estudio y sacaron este Cruelty Without Beauty en 2002 que se me antoja que roza a gran altura y no representa un lunar en su discografía.
Es más, me parece un gran disco.
Y los que me conocéis ya sabéis que yo, en un principio, lo de las reuniones las pongo siempre en cuarentena, aunque también al final claudique en muchos casos.
Algo bueno que tiene Soft Cell es que nunca nadie podrá sonar como ellos. Suena tonto, pero así lo veo. Sólo estos dos personajes juntos son capaces de sonar así. Para bien o para mal.
Así que nadie mejor que ellos para darle continuidad al sonido Soft Cell que ellos dejaron aparcado en el 84 por última vez.
Mejores medios, pero sin embargo manteniendo la esencia que los hizo reconocidos y reconocibles.
Austeridad sonora, melodías y ritmos hechos por Dave Ball que, aparentemente, sólo aparentemente, parecen sencillas y fáciles de elaborar por cualquiera. Pero no es así.
Mar Almond descargando pasión y emoción en su interpretación.
Monoculture, The Night, Dark Times, Together Alone, whatever It Takes, All Out Of Love, y porque no decirlo, todos los temas siguen destilando la esencia fundamental del grupo.
En pocos momentos podemos escuchar acercamientos de los que ambos componentes hicieran por separado durante tantos años.
Y es que parece como si quisieran decirnos a los seguidores de siempre y a los jóvenes que los empezaban a concocer:
"Somos Soft Cell y podemos serlo siempre que queramos"
Un trabajo sin desperdicio. Puede que para algunos suene a tiempos pasados, pero a mí me suena a un gran grupo que seguía ofreciéndonos muy buenos temas.