Y guste o no, Baltimora ocupará unas cuantas líneas cuando se haga, sino se hizo, un libro dedicado al Italo.
Al igual que es un clásico ya en cualquier recopilatorio de los 80 con sonidos más comerciales.
Es cierto que el tema es comercial por los cuatro costados, y que para mí hay temas mejores dentro del estilo.
Pero tampoco me duelen prendas en reconocer que la cancioncilla tenía y tiene ese estribillo contagioso y quedón, al igual que cumple el requisito de entretener y bailarse.
Sintetizadores creando melodías y ambientes. Baterías electrónicas marcando un ritmo pesado. Aquí también hay una guitarra, llamésmola, potentilla.
Puro y simple Italo, Euro dance, o como quieras llamarlo de libro.
Un Tarzan Boy que se editó en el año 84 y que arrasó en toda Europa.
Por si a alguno le interesa, Baltimora realmente se llamaba Maurizio Bassi.
Y puede que para mí sea de los últimos temas Italo que realmente merecieron la pena. Por lo menos de los que tuvieron éxito. Antes que se convirtiera todo en algo bastante prescindible.
Sin duda alguna es una de las canciones himno del Italo disco, hasta podría atreverme a decir que supera al Bambina de David Lyme.
ResponderEliminarLástima que la carrera de fue tan corto.
Pues no te digo yo que no. Auque los dos sean dos grandes temas del estilo.
ResponderEliminarSaludos sintéticos.