Corría el año 82 y este tema sonaba bastante en las emisoras de radio.
Aún siendo yo un modernete de plexiglás por aquellos años, esta canción del veterano rocker me gustaba y me reconfortaba.
Rock de toda la vida. Un rock suave apto para todos los oidos y que me encantaba escuchar cuando sonaba.
Bog Seger era ya un veterano en aquellos años y yo no conocía nada de su obra. Y aún a día de hoy reconozco mi ignorancia sobre ella.
Pero eso no es obstáculo para reconocer una buena canción.
Con Shame On The Moon te das cuenta que hay canciones para ocasiones determinadas.
Esta concretamente me vienen instantáneamente imágnes de atardeceres en la playa y carreteras solitarias por las que puedes ir tranquilamente deleitándote con lo que vas escuchando.
Bueno, soy así.
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