19/09/2009
JAPAN - TIN DRUM
Es el caso de David Sylvian y su grupo Japan, pues ya en sus primeros discos Postpunk y New Wave más guitarreros eran elegantes.
Nunca contaron con un éxito masivo, y fue curiosamente con este su último disco oficial en estudio (el último fue el directo Oil on Canvas, más contractual que otra cosa), donde consiguieron el reconocimiento en las listas inglesas y europeas, siendo tal vez el disco menos asequible, pero bien es verdad que en el año de su edición, en el 81, los discos con sonido electrónico tenían más posibilidades de ser escuchados que en años anteriores.
La influencia oriental del grupo es notable y palpable. Desde la portada a los sonidos que encierra este disco. No en vano, David ya había trabajado con Riuichy Sakamoto de la YMO, y con el guitarrista del también grupo japonés Ippu Do.
Temas como los singles The Art of The Parties o Visions of China son pequeñas joyas de los 80 con un sonido maravilloso y casi matemático porque, al igual que todos los temas, son tocados con una precisión casi matemática.
Mención especial a la voz sensual y penetrante de David, pero también para el sonido espectacular del bajo que tocaba Mick Karn, de origen Greco-Chipriota que es de una técnica y calidad que me atrevería a decir que pocos como él han sabido utilizar ese instrumento.
Sin darte cuenta, se te mete por los oidos, y te empiezas a dar cuenta que sobresale por encima de los demás intrumentos sin ahogarlos, y que lleva una parte muy importante del peso de los temas.
Indiscutiblemente un disco imprescindible de los 80, y un referente para los que quieran aprender a tratar la electrónica y su sonido con suavidad, cariño y elegancia.
2 comentarios:
ResponderEliminarRodrigo dijo...
¡Vaya pedazo de disco! recuerdo que me lo compré en verano de 1983 y esperaba algo asi como Fad gadget o Depeche Mode. Me decepcionó de inició pero poco a poco lo fui comprendiendo mejor. Como decimos en México "me cayó el 20" al escuchar el tema "Ghost".
Debo mencionar que además de este disco jamás escuché nada más de Japan y Sylvian, pero sí estoy interesado.
Ahora bien, cualgas tarde el disco porque hace un mes me lo compre en www.mp3va.com xD
Saludos!!
20/9/09 05:25
chorbyradio dijo...
No importa que lo hayas comprado, mejor.
Lo que sí es importante es que te guste y lo valores tal como es, un gran disco.
Saludos eléctricos.
20/9/09 15:18
Es curioso. Japan lo considero un buen grupo pero tal vez la sinuosa voz de Sylvian me llega a marear a lo largo del disco. Sé que parece una idiotez, pero así lo siento. Fluctua demasiado. Coincidimos en que "Visions of China" y "Art of Parties" son dos temazos.
ResponderEliminarSaludos a todos.
Amigo Atom, sabes que mi lema jilipollas es ME GUSTA LO QUE ME GUSTA.
ResponderEliminarPor tanto, no es una idiotez porque es lo que sientes.
Personalmente es un grupo que me fue ganando poco a poco pero con fuerza y me parecen muy buenos y con una calidad en el sonido impecables.
Saludos sintéticos.
Lo cierto es que me habéis descubierto a un gran grupo. De Japan tan sólo tenía suelta la canción “Don’t Rain On My Parade” de su primer disco “Adolescent Sex”. Ya en sus guitarreros comienzos, había algo muy peculiar en los temas de Japan, sin embargo, ni me imaginaba en qué sentido iban a evolucionar.
ResponderEliminar“Tin Drum” es una despedida estupenda. De Sakamoto, Sylvian aprendió (o quizás se influenciaron mutuamente) un cierto uso de los entonces recientísimos samplers (si ahora viniera alguien y me dijera que no hay samplers en el disco, me dejaría por los suelos, jaja) . Un uso refinado, delicado, en contraste con el uso más abrupto y básico que solían hacer de dicho instrumento los artistas de la época. Por supuesto, hay que comprender que cuando un instrumento tan innovador como el sampler acaba de salir al mercado, lo primero que van a hacer sus usuarios es exprimirlo hasta el límite y no a hacer un uso depurado de él. Creo que, en este sentido, Sakamoto/Sylvian fueron unos adelantados al pulir tanto los sonidos sampleados. Y lo mejor de todo es que Japan aprovechan las posibilidades del citado aparato para empapar su pop/new wave (o como quieran llamarlo) de los más variopintos sonidos orientales. Si el disco se hubiera editado diez o quince años después, lo habrían catalogado dentro de eso que llaman “world music”. No en vano, álbumes como “Tin Drum” pusieron su granito de arena para esa “revolución” de la “música étnica” que vino después y que ya se venía gestando, desde hacía más una década, con la irrupción de la música hindú a través del rock psicodélico o la influencia africana de Fela Kuti.
En fin, “Tin Drum”, un disco extrañamente orgánico, que parece que está vivo. A las canciones que destacáis (la magnífica “Ghosts” y “Visions Of China”), yo añadiría “Still Life In Mobile Homes”, en la que los sonidos orientales alcanzan su punto más barroco encajándose, sin embargo, sobre un ritmo más o menos funk que me parece muy característico de los ochenta. Además, ¿quién sino los de Sylvian iban a tener las narices de inventarse un estribillo con semejante “temática arquitectónica” y salir airosos de la jugada?
Saludos y gracias por acercarme a los Japan ;)
Un placer amigo. Japan es el típico grupo que no llegué a comprender bien en su momento.
ResponderEliminarTal vez demasiado Arty para un chaval de 15 años que buscaba ritmos sintéticos y bailables por doquier.
Fue años después cuando me fui dando cuenta de su grandeza y, es de esos grupos, que cada años que pasa los valoro mucho más que en su momento.
Saludos sintéticos.