Puede un disco hacer que sientas angustia, inquietud, desasosiego, incluso miedo?
Pues todo eso es lo que me produce a mí este disco de SPK.
Sé que suena un poco ridículo, e incluso os preguntareis que si me pasa todo éso cuando lo escucho porqué lo pongo.
La razón no es otra que tiene algo que hace que te atrape.
Serán esos sonidos oscuros, industriales. Esas percusiones enre industriales y mántricas.
Será poque los temas salen uno tras otros sin lugar al descanso mental.
No lo sé.
Sólo sé que los australianos producen en mí con este disco un estado distinto a lo acostumbrado con otros discos.
Todo se asemeja a un extraño masoquismo audicional. Las percusiones obsesivas, los sonidos que parece que salen de la nada. Las voces de ultratumba que aparecen y desaparecen, que están de fondo, pero que el tema los necesita como agua de mayo.
No soy nada entendido en los que a música industrial se refiere, pero entiendo porque SPK con sus primeros trabajo fue catalogados como uno de los mejores en su género.
Y es que cuando un disco consigue lo que SPK consigue en éste, no puede haber otra razón más que el disco es bueno.
El disco fue editado en el año 82 con una portada distinta a ésta. Tampoco aparecían títulos de los temas. Cada cara los temas estaban uno tras otro sin descanso.
Esta es la edición en cd editada en el 92, donde ya vienen los títulos de los catorce temas que lo componen.
No es un disco apto para todos los oidos, pero sí que es un disco que llamará a más de uno la atención.
Pues todo eso es lo que me produce a mí este disco de SPK.
Sé que suena un poco ridículo, e incluso os preguntareis que si me pasa todo éso cuando lo escucho porqué lo pongo.
La razón no es otra que tiene algo que hace que te atrape.
Serán esos sonidos oscuros, industriales. Esas percusiones enre industriales y mántricas.
Será poque los temas salen uno tras otros sin lugar al descanso mental.
No lo sé.
Sólo sé que los australianos producen en mí con este disco un estado distinto a lo acostumbrado con otros discos.
Todo se asemeja a un extraño masoquismo audicional. Las percusiones obsesivas, los sonidos que parece que salen de la nada. Las voces de ultratumba que aparecen y desaparecen, que están de fondo, pero que el tema los necesita como agua de mayo.
No soy nada entendido en los que a música industrial se refiere, pero entiendo porque SPK con sus primeros trabajo fue catalogados como uno de los mejores en su género.
Y es que cuando un disco consigue lo que SPK consigue en éste, no puede haber otra razón más que el disco es bueno.
El disco fue editado en el año 82 con una portada distinta a ésta. Tampoco aparecían títulos de los temas. Cada cara los temas estaban uno tras otro sin descanso.
Esta es la edición en cd editada en el 92, donde ya vienen los títulos de los catorce temas que lo componen.
No es un disco apto para todos los oidos, pero sí que es un disco que llamará a más de uno la atención.
Atónito estoy! :D Autodolor.
ResponderEliminarA mi me deja atónito que te pases por aquí y que hayas vuelto a pedirme amistad en face.
ResponderEliminarSaludos sintéticos.