La cosa empieza muy bien con un un Hard Rock como es Tie Your Mother Down. Bastante marca de la casa y un sonido al que nos tenían acostumbrados.
Personalmente en la cara a, Mercury se desmarca de la línea de dicha cara y si bien no empieza a dar aún con los soporífieros temas lacrimógneos que haría en la década posterior, roza un puntito de ello en You Take My Breath Away pero pasa bien el corte. En The Millonaire Waltz se enfarraga demasiado para mi gusto en intentar hacer algo épico pomposo de Rock que queda un poco a medias.
Long Away y You and I, de May y Deacon respectivamente, devuelve todo a los cauces del Rock sin complicaciones.
La cara b se abre con Somebody to Love, uno de los singles de éxito y una fantástica canción donde contiene unos coros fantásticos y el tema tiene una gran fuerza.
White Man comienza con un sonido muy Rock Country para pasar un temazo de Hard Rock y siendo para mi de lo mejor del disco. Puede porque este son los Quen que más me gustan.
Good Old-Fashioned Lover Boy nos envía de forma inmediata a los tiempos del vodevil y de los años 20. Una melodía encantadora. Y es que cuando Mercury quería, podía hacer gozadas como esta llegando a la fibra y sin pasar por la azúcar extremo.
Taylor es fiel al Rock de siempre. Y lo demuestra en Drowse. Tema melódico y que entra sin problema y que también canta él.
El disco remata con Teo Torriatte (Let Us Cling Together). La verdad es que tiene unas partes magníficas y otras pues más prescindibles.
No es el mejor disco para mi. Los tenían mejores antes y después también. Pero creo que A Day in The Races es un buen trabajo que vale la pena escuchar.
En el top 5 de Queen seguro, después es par discutir en que puesto. Saludos!
ResponderEliminarUfff! Me lo pones difícil. No lo sé, pero puede que tengas razón.
ResponderEliminarSaludos sintéticos.